Extractos mínimos de Fuegos,
de MARGUERITE YOURCENAR
(Bélgica, 1903-EE.UU., 1987)
* El alcohol desembriaga. Después de beber unos sorbitos de coñac, ya no pienso en ti.
* Casandra aullaba sobre las murallas, dedicada al horrible trabajo de dar a luz al porvenir.
* No hay amor desgraciado: no se posee sino lo que no se posee. No hay amor feliz: lo que se posee ya no se posee.
* ¿A dónde huir? Tú llenas el mundo. No puedo huir más que en ti.
* No me importa cuál sea el paso en falso que te haga caer sobre mi cuerpo.
* La indiferencia es tuerta; el odio es ciego; ambos tropiezan uno al lado del otro y caen a la fosa del desprecio. La indiferencia ignora; el amor sabe; deletrea la carne. Hay que gozar de un ser para tener ocasión de contemplarlo desnudo.
* Un corazón es tal vez algo sucio. Pertenece a las tablas de anatomía y al mostrador del carnicero. Yo prefiero tu cuerpo.
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Selección extraída de: Yourcenar, Marguerite: Fuegos, Editorial Punto de Lectura, Bs.As.
Crédito foto: Gustavo Rodríguez
3 comentarios:
esa señora... ah... esa señora... hermoso...
Esa señora era una señorita. Gracias, Irene
Hola Irene, buen inicio y persistencia en el año¡¡¡
Siempre recuerdo de Yourcenar el final de Alexis o el tratado del inútil combate, un personaje le dice a ella: -Te pido perdón no por irme, sino por haberme quedado demasiado.Graciela de frías.
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