viernes, 17 de julio de 2009
Hoy, ser pobre es in
A raíz del copete de un suplemento cultural, en el que sobresale dato más que "curioso" acerca de un poeta
Allá por los ‘60, ’70, el medio pelo de la pequeñoburguesía porteña adoptó la diferenciación clasista del gusto popular mediante los modismos in y out, entre tantos otros. A modo de ejemplo, la cumbia era mersa o bien out; ser fan del Club del Clan o de Sandro, ídem; etcétera. De distintos blogs, extraigo comentarios en los que se amplía la variada denominación discriminatoria a lo largo de los años:
Lo que pasa es que Galactica era divertida pero medio mersa; a lo yanqui berreta.
Que ese sujeto, situado a mitad de camino entre el “petitero” de los años ’50 (sic: "niños bien" que paraban en el Petit Café –Santa Fé, entre Callao y Riobamba- y que usaban sacos ceñidos de tres botones y solapas angostas, zapatos con hebillas o mocasines, medias amarillo patito y pantalones con piernas ajustadas, con bocamangas”) y el habitué de “Mau-Mau” sesentista (tiempos de mersas y caqueros), solo parecía dejar anclado al producto en el tiempo. En el tiempo que se tomaba vermouth (porque había tiempo, ganas y costumbre).
**
Y si bien, durante buena parte de los 240 años de historia de la marca, Cinzano fue simplemente un vermouth, a secas, en un momento tuvo que reformularse por una razón muy simple: el vermouth, como rito y como horario, es una antigüedad que ha desaparecido y la mitad de su target actual ni siquiera sabe que quiere decir la palabra.
**
Un famoso dicho "grasa" era, "petiteros, dos tajitos, tres botones, hay que manga de maricones".
Los mocasines tenía que ser de Guido y si quieren repasar la sociología del petitero revisen a Landrú y los números viejos de Rico Tipo, de Divito. En los '50 se pusieron de moda los intelectuales llamados "existencialistas" porque todos llevaban un tomo del "ser y la Nada de Jean Paul Sartre. Luego de los existencialistas, y con la Revolución Libertadora, aparecieron los petiteros. Luego, los caqueros, pero esa, esa es otra historia.
**
cool o kitsch;
**
Exfoliar: Es la descamación de la piel por medio de productos cosméticos.También se lo llama peeling y sirve para quitar las células muertas y regenerar la piel para embellecerla.Extremo deportes,situaciones, tragos):Propio de la vida adrenalínica que tanto disfrutan los burgueses acomodados inventando nuevos deportes sin traducción al castellano (Kiteboard, referencias a Costantini, bunging, wakeboard)tan alejados del mersa padel.
**
AGUANTE LOS CHETOS. SOMOS MUCHO MÁS PERSONAS QUE USTEDES VILLEROS DE MIERDA, ANIMALES… SER CHETO ES LO MÁS, Y DOY GRACIAS A DIOS POR HABERME HECHO ASÍ Y NO HABERME HECHO UNA VILLERA DE MIERDA, CHORRA Y DROGADICTA. AGUANTE LA ELECTRONICA QUE ES LA MEJOR MUSICA, NADA QUE VER CON ESA CUMBIA QUE ES MUSICA DE POBRES MUERTOS DE HAMBRE.
**
Lo que me da simpatía es que parece ir a contramano del concepto ese del jazz como la “gran música popular”. En un experimento “serio” (aburrido), la idea sería demostrar que algunas canciones de baja estofa (rock) se pueden convertir en algo elevado (jazz). Acá parece reírse desde el principio de eso, mostrando que, por el contrario, el jazz puede ser lo más mersa que hay, que partimos de algo grasa para llegar a algo que el medio pelo va a pensar que es refinado y lo va a consumir pensando que se está “llenando de cultura” mientras se sigue empapando de grasa, a lo mejor más que antes. (Eliseo Brener)
Me pregunto si la inclusión de “despachante en una gasolinera” o algo por el estilo, a modo de dato de autor, conlleva admiración de parte del periodista que redactó el copete introductorio, o si “quedará bien” ser poeta y trabajar en una estación de servicio; o si, en su defecto, el poeta en cuestión fuera estudiante de Letras o bien tratante de blancas, alteraría el orden o el producto.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Somos parecidos a esos sapos que en la austera noche de los pantanos se llaman sin verse, doblegando con su grito de amor toda la fatalidad del universo.
René Char
No haría falta amar a los hombres para darles una ayuda real. Sólo desear hacer mejor cierta expresión de su mirada cuando se detiene en algo más empobrecido que ellos, prolongar en un segundo cierto minuto agradable de su vida. A partir de esta diligencia y cada raíz tratada, su respiración se haría más serena. Sobre todo, no suprimirles por entero esos senderos penosos, a cuyo esfuerzo sucede la evidencia de la verdad a través de los llantos y los frutos.
René Char
René Char
No haría falta amar a los hombres para darles una ayuda real. Sólo desear hacer mejor cierta expresión de su mirada cuando se detiene en algo más empobrecido que ellos, prolongar en un segundo cierto minuto agradable de su vida. A partir de esta diligencia y cada raíz tratada, su respiración se haría más serena. Sobre todo, no suprimirles por entero esos senderos penosos, a cuyo esfuerzo sucede la evidencia de la verdad a través de los llantos y los frutos.
René Char
2 comentarios:
mi padre era empleado municipal, cuidaba la plaza del pueblo. tenía cuarto o quinto grado pero un gran conocimiento de literatura, sobre todo nacional. cierta vez ganó un concurso y el diario local tituló algo así como el jardinero poeta... les preocupaba que fuera un negrito municipal y poeta... es así y siempre será así... no sé si te dice algo. mi saludo, h
Es como una nota de color, ¿no? Salud, Irene
Publicar un comentario