sábado, 8 de mayo de 2010
Los pies firmemente plantados en nada
URSULA K. LE GUIN
(EE.UU., 1929)
Dos poemas y una entrevista
Hier steh' ich
Estoy aquí, los pies firmemente
plantados en nada
y espantando a los mosquitos.
Sobre la canción del
sinsonte declaro que
estoy aquí. Dónde es aquí
sólo Dios lo sabe
sin embargo
sigo estando aquí.)
**
Hier steh' ich
I stand here, feet planted
firmly in nothing
and brushing away the gnats,
state, over the mocking-
bird's song, I
stand here. Where here is
God knows
still
I keep standing.
***
Invocación
Devuélveme mi lengua,
déjame hablar la lengua que me enseñaste.
Diré las grandes mentiras en tu honor,
alabándote sin nombrarte,
obedeciendo las leyes de la oscuridad y de la métrica.
¡Sólo déjame hablar mi lengua
en tu alabanza, silencio de los valles,
ribera norte de los ríos,
tercera cara esquiva,
vacío!
Déjame hablar la lengua materna
y cantaré tan fuerte que
las recién casadas y las viejas
bailarán al ritmo de mi canto
y las ovejas cesarán de pastar y las
máquinas se reunirán para oír
en ciudades silentes
como un anillo de piedras erguidas:
¡Oh, déjame tumbar las paredes cantando, Madre!)
**
Invocation
Give me back my language,
let me speak the tongue you taught me.
I will lie the great lies in your honor,
praise you without naming you,
obey the laws of darkness and of metrics.
Only let me speak my language
in your praise, silence of the valleys,
north side of the rivers,
third face averted,
emptiness!
Let me speak the mother tongue
and I will sing so loudly
newlyweds and old women
will dance to my singing
and sheep will cease from cropping and machines
will gather round to listen
in cities fallen silent
as a ring of standing stones:
O let me sing the walls down, Mother!
Tomados del blog de Beatriz Alicia García (Venezuela), Bitácora para lugares reencontrados. Versión desconocida.
***
Un mago de Terramar
(fragmento)
En el mundo de Terramar hay dragones y espectros, talismanes y poderes, y las leyes de la magia son tan inevitables y exactas como las leyes naturales. Un principio fundamental rige en ese mundo: el delicado equilibrio entre la muerte y la vida, que muy pocos hombres pueden alterar, o restaurar. Pues la restauración del orden cósmico corresponde naturalmente al individuo que se gobierna a sí mismo, el héroe completo capaz de dar el paso último, enfrentarse a su propia sombra, que es miedo, odio, inhumanidad.
***
Entrevista
Por Alejandro Serrano
(Fragmentos)
Alejandro Serrano: La imagen típica de un escritor, sobre todo si tiene cierta reputación y una prolífica carrera internacional, es de una persona habitualmente sentada en su sillón favorito, dando vida a diferentes personajes, alejada del mundo. Sin embargo, sus libros muestran que su vida es mucho más intensa que todo eso, su imaginación tiene fuertes tintes sociales y un profundo conocimiento de la naturaleza humana… ¿cómo pasa sus días Ursula K. Le Guin? ¿Qué experiencias en su vida o qué libros han marcado su concepto de la fantasía?
Ursula K. Le Guin: me temo que, como la mayoría de escritores, Ursula pasa casi todos los días sentada enfrente de un escritorio, con un cuaderno de notas o un ordenador sobre él. Mi vida no es muy emocionante –para nadie-, pero para mí está llena de pasión, ansiedad, alegría, tristeza,... tanto que me asombra pensar en ello.
Ya escribía historias fantásticas cuando tenía ocho años de edad, así que no creo que mis experiencias vitales sean la base de mi forma de escribir fantasía. Simplemente, mi mente funciona así. La “razón pura” es inaccesible para mí; mi razón trabaja a través de la imaginación.
Alejandro Serrano: La primera vez que alguien me habló de Terramar, hace mucho tiempo, la describió como “una muy buena saga de fantasía pero demasiado feminista”. Siempre sospeché de las etiquetas, así que ese comentario reforzó mi intención de leerla. Y no sé cuál fue su intención al iniciar la saga, pero creo que intentó reclamar la imagen de la mujer en la fantasía pero sin olvidar al hombre, especialmente a aquel que respeta a la mujer y su papel en la vida. ¿Estoy equivocado? ¿Cree que la fantasía actual ignora bastante más el género de los personajes para centrarse en su psicología? Hoy en día hay muy pocas Éowyns por ahí, la mayoría de los personajes femeninos en los libros actuales toman roles protagonistas por derecho propio, no sólo como complemento del varón. No esperan a sus hombres cosiendo y suspirando, afortunadamente.
Ursula K. Le Guin: No estás equivocado, pero debes recordar que comencé a escribir Terramar en 1968, cuando no había mujeres en la fantasía heroica, tan sólo Éowyns. De hecho, había pocas mujeres en la literatura, tan sólo Emmas Bovary. Los libros trataban sobre los hombres, que hacían cosas propias de su género; la presencia de las mujeres era marginal, y tan sólo eran concebidas en su relación con los hombres. “Un mago de Terramar” no pone en cuestión eso en absoluto. El siguiente libro, “Las tumbas de Atuán”, sitúa a la mujer como centro, acompañada de un hombre: ninguno de los dos puede lograr su libertad sin el otro. “La costa más lejana” vuelve al mundo de los hombres. Los últimos tres libros de la saga miran al mundo de los hombres pero poniendo sus fundamentos morales bajo una lupa, a pesar de su realidad.
Sin embargo, la palabra “feminista” ha sido malinterpretada y denigrada, y al feminismo hemos de dar las gracias de la inclusión en la literatura de todo el género humano, no solamente de su mitad masculina.
Lo cierto es que las mujeres aún tienen más posibilidades de terminar al cuidado de la casa que los hombres –quizá cosiendo, quizá suspirando, quizá estudiando matemáticas o tocando la viola, pero casi siempre al cuidado de los niños, poniendo la comida en la mesa o limpiando el suelo. ¿Hay que avergonzarse de ello? ¿En qué hace a la mujer inferior al hombre dedicarse a esas tareas? Las mujeres no tienen por qué imitar al hombre para ser consideradas seres humanos.
Durante mucho tiempo, la ficción falló precisamente en eso, en preguntarse qué ocurre en el hogar, entre las mujeres. Si está cosiendo, ¿por qué lo hace? ¿Quiere hacer esto o no? ¿Por qué deshace el tapiz cada noche? ¿Suspira por su amante ausente, o por el estado de la economía del país, o el problema del origen de la maldad? ¿Cómo es la vida, la actual vida interna de la mitad de la raza humana?
Si a un hombre no le interesan las respuestas a estas preguntas, dejemos que lea libros para chicos sobre batallas, etc. Hay muchos de este tipo.
Alejandro Serrano: Su trabajo en Terramar y otras novelas se centra habitualmente en la maduración de sus personajes, y en sus esfuerzos por encontrar su lugar en un mundo cruel lleno de peligros, cuyo equilibrio tiende a ser volátil… Esto es únicamente un reflejo de la vida real, trasplantado a un mundo lleno de criaturas sobrenaturales, y que realza aún más la universalidad de los temas sociales de sus libros. La mayoría de la fantasía suele centrarse en héroes sin escrúpulos o en escenas donde la espectacularidad eclipsa toda reflexión. Algunas veces parecen intentos por esconder la falta de argumentos del escritor, pero sus libros se centran por completo en estas reflexiones… ¿La fantasía debería hacernos pensar sobre el mundo real, sobre nuestra relación con el resto del mundo?
Ursula K. Le Guin: Dudo mucho a la hora de afirmar que cualquier tipo de literatura “debería” hacer algo; esto reduce al arte a la practicidad –enseñando, inculcando moral-, como si fuese su única función posible. Así que diría sólo que la fantasía que no explore de alguna forma metafórica nuestra propia existencia en el mundo, probablemente resulte trivial. No obstante, también puede ser divertida.
Alejandro Serrano: El papel de la mujer y el hombre en la sociedad occidental ha cambiado mucho en las últimas décadas, y ambos espacios vitales se han aproximado mucho, pero… algunas veces parece que si no estamos casados, no tenemos niños o relaciones estables no podemos realizarnos como personas; y si tenemos niños, tanto la mujer como el hombre han de trabajar fuera, sin tiempo para educarlos. ¿No cree que en muchas ocasiones se nos pide, a hombres y a mujeres, cumplir con su papel en el seno de la familia y en nuestro trabajo como si fuéramos superhéroes?
Ursula K. Le Guin: Sí. Veo lo duro que ha sido para la generación de mis hijos (ahora en los cuarenta) trabajar, cumplir con sus deberes, con muy poco tiempo para tomarse las cosas con tranquilidad; siento profundamente que algo está muy mal. Es el trabajo y su naturaleza los que están equivocados. Creo que los hombres y las mujeres están atrapados en una gran máquina que ha convertido al mundo, la máquina del capitalismo, en la que la productividad, la actividad y el crecimiento no pueden parar ni un momento. Esta gran máquina cubre la Tierra de residuos y devora a sus hijos.
Alejandro Serrano: Todos los libros de la saga de La Costa Oeste (‘Gifts’, ‘Voices’ y ‘Powers’) serán publicadas en España, según el editor de Minotauro. Por el momento, tan sólo han traducido el primero, “Los Dones”, una novela que explora la naturaleza de los poderes, el crecimiento personal y como éstos pueden entrar en conflicto con el resto del mundo. Nuestro conocimiento puede ser útil, pero también el origen de nuestra ruina. Esta lección está bastante lejos del trato que usualmente se le da en la literatura, como regalos sin condiciones: pero hemos de ser cuidadosos al usarlo, son peligrosos. No creo que estos libros estén dirigidos sólo a la audiencia juvenil, los adultos pueden aprender mucho de estas historias y aplicar sus lecciones en su vida real, en su relación con los demás. ¿Cuántos conflictos podrían haberse evitado si fuésemos más cuidadosos con nuestras diferencias?
Ursula K. Le Guin: Los editores adoran la categoría de “joven adulto”, que les proporciona ventas seguras entre los adolescentes. Desafortunadamente, si publicas un libro en esa categoría puedes estar seguro de que los críticos (incluso dentro de la ciencia ficción y la fantasía) lo ignoren, y que muchos adultos lo eviten, creyendo que tan sólo es para críos. El hecho es que muchos libros para “jóvenes adultos”, particularmente en la fantasía, difieren únicamente del resto en que sus protagonistas suelen tener menos de veinte años. Me gusta escribir sobre personas de esta edad porque son abiertos, vulnerables, su encuentro con el mundo es fresco y apasionado; pero ciertamente, no creo que mis libros con protagonistas jóvenes estén tan sólo escritos para adolescentes (después de todo, tan sólo hay que fijarse en Romeo y Julieta)…
Alejandro Serrano: Mientras esperamos por ‘Voices’ (“Voces”) y ‘Powers’ (“Poderes”) en España, Minotauro publicará a últimos de febrero de este año un libro con algunas historias suyas de ciencia ficción: “Los Mundos de Ursula K. Le Guin”, con ‘The Left Hand of Darkness’ (“La mano izquierda de la Oscuridad”), ‘The Word for the World is forest’ (“El nombre del Mundo es Bosque”), and ‘The Dispossesed’ (“Los Desposeídos”). ¿Siente que hay diferencias sustanciales entre escribir ciencia ficción o fantasía? ¿Puede contarnos algo sobre estas historias?
Ursula K. Le Guin: Estas tres novelas son todas de ciencia ficción, no de fantasía; esto es así, se sitúan en un universo en el que se obvian las leyes de la física que conocemos, pero no violan abiertamente los principios científicos, tal y como hace la fantasía con sus magos, gatos alados o los Alephs.
Creo que la fantasía es la más antigua clase de literatura que todavía se practica, y la ciencia ficción la más reciente. La ciencia ficción es un derivado del realismo. Al igual que el realismo, usa el mundo actual como base, a menudo el contemporáneo. Difiere del realismo únicamente en la extrapolación de un futuro al que se puede llegar a través de la actualidad presente, o en imaginar algún plausible avance científico o cambio social, todo ello desarrollado de la forma más realista y preciosista posible. Es una forma de ficción altamente ingeniosa y divertida, que he disfrutado leyendo y escribiendo.
Creo que la ciencia ficción está cambiando de forma, perdiendo su esquema intelectual, mezclándose bajo otras formas, y tal y como el mundo cambia rápidamente a nuestro alrededor, la ficción no puede, literalmente, mantener este crecimiento de la ciencia y la tecnología, y sólo lo intenta.
Alejandro Serrano: Hay sectores en nuestra sociedad (y en EE.UU.), que intentan forzar a la población a abrazar ideas políticas que creíamos superadas, como el fundamentalismo religioso, los tabúes sexuales o su visión de la violencia justificada. Persiguen a todo el que no opina de la misma forma, y aseguran que el país sufre bajo la falta de moralidad… ¿Cree que existe una moral distinta del fundamentalismo político o religioso, más tolerante en términos sociales, con mayor libertad de pensamiento? ¿Qué papel tiene la fantasía en ella?
Ursula K. Le Guin: Diré únicamente que tanto la ciencia ficción como la fantasía son formas de lieratura que permiten imaginar ALTERNATIVAS. Sociedades, políticas, culturas, reglas de género, ideas religiosas,… todas ellas alternativas. Y precisamente por ello tienen un gran papel a la hora de cultivar el uso racional de la imaginación, en liberar a las mentes de la mano muerta de las ideologías rígidas e irracionales.
(...)
Alejandro Serrano: El trabajo de un escritor nunca parece finalizar, al menos si la inspiración acude… ¿qué proyectos tiene en mente?
Ursula K. Le Guin: Mi próximo libro, que se publicará esta primavera, se titula Lavinia. Es la chica italiana con la que Aeneas está condenado a casarse, y para poder fundar la ciudad y el imperio de Roma. Los últimos libros de la Eneida están llenos de batallas: Virgilio tenía bastante que contar sobre la guerra, su locura y tragedia, porque (creo) él quería mostrar a su nuevo emperador Augusto el coste real del Imperio y preguntarle: “¿merece la pena?”. Pero no tuvo tiempo de contarnos mucho sobre Lavinia, o al menos de dejarla hablar. Así que, leyendo el poema, comencé a preguntarme sobre ella, le dije: “¿Lavinia, quién eres?”. Y ella me respondió. Y aquí está la novela. Es diferente a todo lo que he escrito hasta ahora. Estoy muy contenta con ella.
Y tras Lavinia no sé lo que haré, nunca lo sé.
Alejandro Serrano: Finalmente, ha sido un placer conocerla… ¿Qué diría a sus fans de Fantasymundo y a aquellos que aún no han leído sus libros?
Ursula K. Le Guin: Un escritor sin lectores es una criatura miserable. Si sois felices leyendo mis libros, creedme, ¡soy feliz porque los leéis! Y estoy feliz de haberos encontrado, en una forma misteriosa –la única magia auténtica que conozco-, en el espacio de la literatura, donde las mentes y la imaginación se encuentran, se unen y juegan juntas, y aunque seamos siempre extraños, aún más por hablar en distintas lenguas, nos comprendemos.
He disfrutado esta entrevista. ¡Muchas gracias!
Fuente: Tomada de fantasymundo.com
Foto: ídem.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Somos parecidos a esos sapos que en la austera noche de los pantanos se llaman sin verse, doblegando con su grito de amor toda la fatalidad del universo.
René Char
No haría falta amar a los hombres para darles una ayuda real. Sólo desear hacer mejor cierta expresión de su mirada cuando se detiene en algo más empobrecido que ellos, prolongar en un segundo cierto minuto agradable de su vida. A partir de esta diligencia y cada raíz tratada, su respiración se haría más serena. Sobre todo, no suprimirles por entero esos senderos penosos, a cuyo esfuerzo sucede la evidencia de la verdad a través de los llantos y los frutos.
René Char
René Char
No haría falta amar a los hombres para darles una ayuda real. Sólo desear hacer mejor cierta expresión de su mirada cuando se detiene en algo más empobrecido que ellos, prolongar en un segundo cierto minuto agradable de su vida. A partir de esta diligencia y cada raíz tratada, su respiración se haría más serena. Sobre todo, no suprimirles por entero esos senderos penosos, a cuyo esfuerzo sucede la evidencia de la verdad a través de los llantos y los frutos.
René Char
No hay comentarios:
Publicar un comentario