viernes, 1 de noviembre de 2013

Cansado de escribir sobre pájaros

JUAN CARLOS MOISÉS
(Sarmiento, Chubut, 1954) 

Entre alguien y nadie

Entre esto y lo otro hicimos
construir una pared bien alta.
Así dividimos el terreno
entre alguien y nadie.
El ciruelo, el damasco y el manzano,
de un lado; lo otro, del otro.

Pero anoche, mientras dormíamos,
el vendaval burló la mampostería
divisoria y avanzó sobre los frutales,
los inclinó con violencia, rompió
varias de sus ramas, tiró la fruta
y la desparramó por todo el lugar
como un chico a sus juguetes.
***
Esta boca es nuestra
Tomada del blog poetassigloveintiuno


Viendo con infinita tristeza
que su compañero de aventuras
yacía a lo largo de la cama
y habiendo oído su desvarío final,
el bueno de Sancho Panza dijo
al señor escribano —Teniéndola
por el único bien recibido
que hasta el momento no ha cedido
a la derrota, agregue que esta boca
es nuestra y que no devolvemos
las palabras que nos dieron.

                                     (a Santiago Sylvester)
De Esta boca es nuestra, CILC, 2009.
***
Cansado de escribir sobre pájaros

Cansado de escribir sobre pájaros
de verlos escucharlos cada mañana
de leer sobre pájaros
suaves y rápidos cansado
cansado de esa imagen repetida
acabé con todos
los pájaros del vecindario
después acabé con los pájaros de los poemas
después con los poemas
y por último soñé
soñé que yo era un gran pájaro

y no me animé
bajé el cañón del revólver.
 
De Nueva Poesía Argentina, Editorial Hiperión)
**
El sábado 2 de noviembre, a las 17.30, en el Auditorio del CeRET, Ex Proveeduría de YPF, ubicado en Kilómetro 3, en la ciudad de Comodoro Rivadavia, Chubut, se presenta Baile del artista rengo, nuevo libro de micro-ficciones de Juan Carlos Moisés.

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Somos parecidos a esos sapos que en la austera noche de los pantanos se llaman sin verse, doblegando con su grito de amor toda la fatalidad del universo.
René Char


No haría falta amar a los hombres para darles una ayuda real. Sólo desear hacer mejor cierta expresión de su mirada cuando se detiene en algo más empobrecido que ellos, prolongar en un segundo cierto minuto agradable de su vida. A partir de esta diligencia y cada raíz tratada, su respiración se haría más serena. Sobre todo, no suprimirles por entero esos senderos penosos, a cuyo esfuerzo sucede la evidencia de la verdad a través de los llantos y los frutos.
René Char