miércoles, 3 de febrero de 2016

Su pupila es el dado

EDOARDO SANGUINETTI

(Génova, Italia, 1930-2010)

1.
la poesía, en cierto sentido, es una máquina orgánica: (esto es, quiero decir)
rigurosamente fisiológica):
(que exige un mantenimiento vigilado,
cautelosamente controlado): (es como hacer las revisiones, al auto: incluso si,
cómo no? existe la tarea de los nueve años críticos, para la revisión: yo me conformo,
personalmente hablando, con los nueve meses de gestante clásica): (la lubricación
de la versificación es decisiva, como quiera: del motor, de la piel, aún del condón):
pero
ves, ídolo mío, mi carburante de oro, mi tesoro: mi aceite poético eres tú:
**
2.
me he adaptado a las gafas (que la licencia, para mí, ya hace obligatorias),
sólo en un par de días: veo todo más nítido: (pero nada, por esto,
me resulta mejor, en verdad: un semáforo es siempre un semáforo, una acera
es siempre una acera: y yo soy siempre yo, así):
(en cuanto a la molesta sensación de vértigo,
vaticinada, con la hemicránea, por un Instituto Óptico de Avenida Buenos Aires, al cual
asistí, esta vez, lo he experimentado y lo he superado): (el oculista
afirmaba que, con el tiempo, me había construido una representación  arbitraria
de la realidad, ahora destinada, con los lentes, a apartarse de golpe):
(y he podido
esperar, por un instante, para hacerme, a poco precio, una vida y una vista):

Traducción: Dolores Labarcena y Pedro Marqués de Armas
***

ahora consume en su pulgar el liguero y el armario:
su nariz es el palomo;
                                   su pupila es el dado;
muerde ya en tu pie el carruaje y el apio:
no resiste el vidrio, no la cinta;
                                                  el cielo es su piel tierna;
pero en la dureza de sus huesos lo sorprendemos existiendo,
y vemos en sus uñas que crece nuestra muerte.

Traducción de Emilio Coco

1 comentario:

constantino mpolás andreadis dijo...

EH! ESE "CÓMO NO" ES MÍO! - PLAGIO, AGIO, ESPECULACIÓN, REVOLUCIÓN, CASO CERRADO, GATO ENCERRADO, LA OCASIÓN ES CALVA COMO EL AMARILLO NO ES AZUL!

Somos parecidos a esos sapos que en la austera noche de los pantanos se llaman sin verse, doblegando con su grito de amor toda la fatalidad del universo.
René Char


No haría falta amar a los hombres para darles una ayuda real. Sólo desear hacer mejor cierta expresión de su mirada cuando se detiene en algo más empobrecido que ellos, prolongar en un segundo cierto minuto agradable de su vida. A partir de esta diligencia y cada raíz tratada, su respiración se haría más serena. Sobre todo, no suprimirles por entero esos senderos penosos, a cuyo esfuerzo sucede la evidencia de la verdad a través de los llantos y los frutos.
René Char