sábado, 22 de noviembre de 2014

¿Quién responderá de sí?

BEATRIZ VIGNOLI

(Rosario, Santa Fe, Argentina, 1965)

N

Sin el milagro del nombre nada es posible.
Sin a quién llamar en quien llamo, sin cómo llamar,
¿qué traer a sí de ese rostro, qué de su unicidad
podrá, ante mí, reconocerse?
¿Qué llamar de ese rostro sino el signo que conmemora
el día en que lo gratuito se le fingió necesario hasta el fin?
¿Cómo estar ante la propia muerte si no con nombre,
qué sino esa humana piedad del bautismo convocarle ante sí?
Sin el milagro del nombre,
sin esa carta sacra en la baraja,
sin eso que del azar, por locura de amor
es anclado en el ser:
¿qué llave del sentido, qué centro del tiempo?
¿qué madre?
Sin el milagro del nombre la puta Razón
contesta una sola pregunta:
¿por cuánto?
Sin el milagro del nombre,
¿de quién es la historia?
¿quién vive? ¿quién llama?
¿quién, en los repliegues de la luz
mira desde ese rostro
y qué sentido tiene que mire?
Sin el milagro del nombre,
¿quién responderá de sí?


De Lo gris en el canto de las hojas, Baltasara Editora, 2014.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Bellísimo. Gracias.

Susana Tosso

Somos parecidos a esos sapos que en la austera noche de los pantanos se llaman sin verse, doblegando con su grito de amor toda la fatalidad del universo.
René Char


No haría falta amar a los hombres para darles una ayuda real. Sólo desear hacer mejor cierta expresión de su mirada cuando se detiene en algo más empobrecido que ellos, prolongar en un segundo cierto minuto agradable de su vida. A partir de esta diligencia y cada raíz tratada, su respiración se haría más serena. Sobre todo, no suprimirles por entero esos senderos penosos, a cuyo esfuerzo sucede la evidencia de la verdad a través de los llantos y los frutos.
René Char